Nunca pensé que todos los años, haría galletas de formas y las decoraría con icing.  Siempre que las veía comercialmente, además que representan una mano de obra exhaustiva, me parecía que el sabor era bastante simple y aburrido, y ese no es mi estilo de galleta.

Mi fuerte no es la decoración minuciosa en la pastelería, y le tengo mucho respeto a las que ejercen esta profesión, pues son insumos costosos, muchísima mano de obra, y usualmente el precio de venta no representa todo lo que se gasta en realmente producir cada una de estas pequeñas obras de arte.

Sin embargo, decorar galletas es algo casi terapeútico de lo relajante que puede ser, si tienes una receta de galletas infalible.  ¡Y la que uso desde hace años es deliciosa, fácil de manejar con un poco de paciencia, y a los niños les encanta!

Algunos tips para que esta experiencia sea placentera para todos:

1. Prepara tu masa hasta 1 mes antes si gustas y la congelas (ver instrucciones abajo), pero no aconsejo hacer todo el proceso el mismo día. Preparo masa, horneo, y luego decoro, en distintos días. Guardo mis galletas horneadas hasta 2 días antes en envase hermético.
2. Preparo mis icings el día que voy a decorar (se espesan si los haces antes), y uso mangas deshechables plásticas, amarradas con una liga o hilo de cocina para que los niños puedan usar las mangas.
3. Todas las decoraciones para las galletas (nonpareils y azúcares de colores, colores para el icing), e ingredientes de pastelería como el merengue en polvo, se encuentran en Chocolatísimo, una tienda especializada en insumos de pastelería, ubicada en Vía Brasil.
4. Trabaja con paciencia. La masa se suaviza cuando se estira, entonces yo estiro entre dos hojas de papel encerado todos los círculos de masa, los refrigero uno encima de otro sobre una bandeja de hornear, y voy sacando uno a uno para no calentar masas hasta que ya sea momento de cortarla con el cortador.
5. Usa papel parchment o Silpats en tus bandejas de hornear galletas, nunca sobre la bandeja directamente.

Galletas de Mantequilla para decorar

La inclusión de queso crema en esta receta le da una facilidad de manipulación a la masa adicional.

2 ½ taza (354 g) harina sin blanquear (unbleached)

¾ taza (156 g) azúcar blanca, superfina (o procesada por 30 segundos en procesador)

¼ cucharadita de sal, fina

2 barras o 16 cucharadas (227 g) mantequilla sin sal, suave pero aún fría, cortada en 16 pedazos de ½”

2 cucharaditas de extracto de vainilla

2 cucharadas de queso crema

Procedimiento:

1. En el tazón de la batidora, combinar el harina, azúcar, y sal, a baja velocidad, unos 5 segundos.  Con la mezcladora a velocidad baja, agregar la mantequilla 1 pedazo a la vez, mezclando solamente hasta que la mezcla se vea húmeda y en grumos, aproximadamente 1 minuto más.  Agregar la vainilla y el queso crema, y mezclar solamente hasta que se hagan grumos de masa más grandes, 5 segundos más aproximadamente.  Apagar la máquina.
2. Amasar a mano la masa 2-3 veces en el mismo tazón, para formar una masa cohesiva. Pasar la masa al mostrador, dividirla en dos, y formar cada mitad en un disco de unas 4” de diametro.  Forrar con plástico y dejar en la nevera por lo menos 30 minutos.

*TIP: Hasta este punto puedes congelar los discos de masa, forrados y dentro de una bolsa tipo Ziploc, hasta por 1 mes.  Descongelala poniendola en nevera 24 antes de usarla y retirala de la nevera unos 30 minutos antes (depende cuan caliente es tu cocina).

3. Estirar cada disco de masa entre dos pedazos de papel cera, dejando que lleguen a temperatura ligeramente pero sin que se calienten, y esparciendo un poco de harina sobre la superficie. Estirar a aproximadamente ¼” grosor y repetir este proceso con el otro disco, dejándolo enfriar en la nevera unos 15 minutos.
4. Preparar bandejas para hornear con papel de horno (parchment paper, NO papel encerado). Precalentar el horno por lo menos 20 minutos antes, a 350 F (325 F si es horno de convección).
5. Retirar la masa de la nevera, y cortar en las formas deseadas, pasando la parte cortante del cortador por un plato con harina (ayuda a prevenir que la masa se pegue al cortador). Colocar cuidadosamente las galletas en la bandeja de hornear, dejando 1” de espacio entre cada una.
6. Hornear unos 15-18 minutos, o hasta que estén ligeramente doradas.  Retirar del horno y dejarlas refrescar por completo antes de decorar.  Guardar en un envase completamente hermético, entre papel cera para no apilar demasiadas una encima de otra.